Sin necesidad, la Selección Argentina terminó sufriendo en un partido para la historia frente a Países Bajos, que lo empató en los 90 minutos. En el alargue terminaron dos a dos y en los penales la figura enorme del Dibu Martínez fue clave para el pasaje a las semifinales donde espera el equipo croata.
Cuando digo sin necesidad es porque el partido lo tenía casi cerrado con un 2 a 0 cuando faltaban diez minutos para terminar el partido. Con un Lionel Messi al que no lo podían parar y fue una figura descollante dentro de la cancha. Un equipo que estaba bien parado y ordenado. Países Bajos solo se nutría de pelotazos y así lo terminó empatando.
Argentina versus Países Bajos: el análisis del primer tiempo
En el primer tiempo, luego de varios minutos sin tener la pelota ni encontrar espacios, Messi frotó la lámpara: juntó dos rivales y puso una pelota entrecortada bárbara para Nahuel Molina, que apareció por sorpresa como delantero y terminó empujándola con la punta del botín para poner las cosas 1 a 0. Argentina se acomodó en el resultado y en juego.

Argentina versus Países Bajos: el segundo tiempo
Así se fueron las cosas al vestuario, con una Argentina que era más con la pelota y un Países Bajos que no lo inquietaba al Dibu Martínez. Con el gol de penal de Messi, luego de una muy buena jugada del Huevo Acuña, parecía que todo se terminaba.
Todo cerraba. El resultado y el juego. Pero con pelotazos, Países Bajos fue acorralando a la Selección Argentina contra el arco del Dibu Martínez. El descuento llegó cuando faltaban ocho minutos para el final de los 90 minutos. Una jugada aislada con un buen cabezazo de Wout Weghorst.
Sobre el final de los 90 minutos, sucedió algo insólito en una Copa del Mundo: el árbitro español adicionó diez minutos. Una locura en un partido que no se había caracterizado por demoras excesivas en el juego. En el último minuto, con una jugada preparada, la selección naranja terminó empatando el partido.

Argentina versus Países Bajos: los suplementarios y la definición por penales
En el suplementario, Argentina volvió a tener la pelota y fue más que su rival, con un tiro en el palo de Enzo Fernández al final del partido. También hubo jugadas de alto riesgo de Messi y Lautaro Martínez, entre otros. Di María ingresó muy bien, pero las cosas parecían no tener otro fin que los penales, como en el Mundial de Brasil 2014.
Y en los penales apareció en toda su dimensión la figura del Dibu Martínez, que atajó los dos primeros penales para darle la tranquilidad necesaria a un seleccionado argentino que en los pies de Enzo Fernández iba a tener un solo error, pero que con el último penal de Lautaro Martínez se logró la merecida clasificación.

Merecida por el juego, por la voluntad de jugar el partido, porque fue más, porque tuvo a Messi en un nivel espectacular, porque metió en los momentos que había que hacerlo y por el corazón tan grande de cada uno de estos futbolistas. Por todo esto, la Selección Argentina disfruta el pase a las semifinales.
Se viene Croacia, en el mismo estadio en Lusail. Es un enorme partido en el que Argentina vuelve a ser favorita.
