Luis Miguel Rodríguez ya está en Santa Fe y se convirtió oficialmente en nuevo refuerzo de Colón. Este lunes, el ídolo rojinegro se sometió a la revisión médica en el Sanatorio Santa Fe, paso previo a firmar su contrato e iniciar su tercer ciclo con la camiseta sabalera. A los 40 años, el delantero regresa para intentar liderar al equipo en un momento delicado, con el club sumido en una fuerte crisis futbolística y disputando la Primera Nacional tras el descenso en 2023.
Un regreso que todo Colón esperaba
Al salir del centro médico, el Pulga dialogó brevemente con los medios y dejó frases que reflejan su compromiso personal y también la realidad que atraviesa el plantel: “Salió todo bien. Ahora tengo que ir al club, así que seguramente mañana hablaremos. Cuando llegué en 2019 era algo similar, pero estábamos en Primera División. Es un momento que a ninguno le gusta estar, pero los chicos están como yo, seguramente con ganas de levantar”, explicó.
El atacante, que fue figura y goleador en el histórico campeonato de 2021, vuelve a Colón después de un último paso por Atlético Tucumán, donde no fue tenido en cuenta por el cuerpo técnico y realizó la pretemporada sin ser parte del proyecto futbolístico.
“Estoy disponible”: el Pulga listo para jugar
En cuanto a su estado físico, el Pulga fue claro y contundente: “Estoy disponible, estoy entrenado. Terminé la pretemporada el viernes. Estoy bien, si no, me quedaría en mi casa”. Estas palabras confirman que el delantero podrá integrarse de inmediato al plantel y quedar a disposición del cuerpo técnico para lo que viene.
Su llegada despierta ilusión en los hinchas, que lo ven como un líder capaz de devolverle algo de jerarquía a un equipo golpeado. Ahora, la gran incógnita será si podrá debutar pronto, teniendo en cuenta que Colón deberá jugar los próximos dos partidos a puertas cerradas por la sanción impuesta tras los incidentes ante Mitre.
El Pulga vuelve a su casa, y la ilusión de los sabaleros renace.
